IMPORTANCIA DEL ENTRENAMIENTO DE FUERZA EN MAYORES
En la FSVSC intentamos complementar el trabajo cardiovascular junto con un programa de entrenamiento de fuerza basado en ejercicios con gomas elásticas, pesos ligeros y el propio cuerpo.
Es una tarea complicada lograr a ciertas edades un compromiso de realizar ejercicio de forma rutinaria con quien no tiene hábito de hacerlo. Es de admirar como de implicados están nuestros residentes con el ejercicio físico cuando muchos señalan “yo no hacía deporte desde el colegio”.
Al final ese es uno de los objetivos de la fisioterapia, empoderar al paciente y dirigirlo hacia una recuperación o mejoría de su calidad de vida.
Es importante combinar el entrenamiento de fuerza con el trabajo cardiovascular entre 3-4 veces por semana. A medida que envejecemos es inevitable perder masa muscular, por eso el entrenamiento de fuerza con pesas, gomas elásticas o el propio cuerpo es una excelente forma de prevenir la sarcopenia (enfermedad que implica la pérdida progresiva de musculatura, la cual puede llevar a la fragilidad y a la disminución de las capacidades físicas).
Todo esto ayudará a nuestros mayores a ser más independientes en el día a día y tener una mejor calidad de vida. Hay que tener en cuenta que al menos 40% de las personas mayores de 80 años sufren una caída, porcentaje que se eleva en 61% en pacientes alojados en instituciones. La fuerza representa un papel importante en la prevención de las caídas.
A través del ejercicio podemos mejorar la estabilidad y el control postural. Aplicar un programa con ejercicio físico en personas mayores consigue mejorar la destreza en habilidades funcionales, estabilidad corporal, fuerza muscular y esquema de la marcha.